30 de diciembre de 2016
22 de diciembre de 2016
MEDITACIÓN
PARA EMPEZAR EL 2017 CON MUCHO ÁNIMO
La Holística observa al
humano como un todo en el que interactúan el cuerpo físico (anatosoma), los
sentidos, las emociones, el cuerpo energético (meridianos, etc.), la mente
inferior y la mente superior (eidosoma).
El sentido común nos confirma
constantemente en nosotros mismos, la relación entre todas estas partes y el
bienestar físico o salud con nuestros sentimientos. Por ejemplo, los riñones (según
la medicina china son la hucha de la longevidad de nuestra vida), además de sus
funciones fisiológicas fundamentales se responsabilizan de encajar los estados
de miedo.
Eso será una constante que
nuestro cuerpo físico va amortiguando incluso en la gestación, tomando partes
del “cielo adquirido” o matrices de consciencia de limitación, es decir,
miedos, incluso ancestrales. Ahí iniciamos un camino de bloqueos, en primera
instancia, si somos afortunados, semiocultos que nos moldearán de manera
inarmónica.
Me permito recomendaros el haceros
la valoración de vuestros bloqueos energéticos con el diagnosis del Método
Keymac en FAROS, para descubriros el inicio de un camino que os haga disfrutar
plenamente de la vida.
Pues en contraposición al
miedo, está el amor –como ciencia compleja-, así que siguiendo el parámetro de
los riñones os propongo un ejercicio para estas festividades. Esas matrices o el
inconsciente colectivo (como lo definió C. G. Jung) genera en estos días un
caudal de energía de sentimiento de generosidad, gratitud y amor que podemos
aprovechar potenciándolo con el fin de neutralizar las moléculas caóticas de
miedo acumuladas en nuestros riñones.
Estas son las cuatro fases a
seguir; son muy sencillas:
1.- Respiración para
equilibrarnos.
En 4 tiempos inhalamos por la
nariz llevando la respiración hasta el abdomen. Sostenemos el aire 2 tiempos.
En 4 tiempos exhalamos, las primeras veces por la boca imaginado que expulsamos el aire desde los
riñones y luego proseguiremos por la nariz. Mantenemos 2 tiempos en pausa sin
aire. E iremos repitiendo este ciclo unos minutos (si eres experto puedes
seguir la pauta 8/4/8/4)
2.- Relajación.
Normalizamos y acomodamos la
respiración a nuestro ritmo. Y nos repetimos interiormente la frase: “a cada
instante que pasa me siento más y más en paz”, notando nuestro cuerpo más
pesado.
3.- Visualización.
Imagina flujos o tubos de
energía limpia y cristalina del color que tu intuición te sugiera en cada ocasión,
rodeándote el cuerpo y específicamente, el timo y tus riñones.
4.- Sentimiento.
Siguiendo con los ojos
cerrados, observa los riñones como si los vieras desde fuera de tu cuerpo, con
un sentir amoroso e ilimitado, con valentía y al mismo tiempo con gratitud como
si te abrazaras a ti mismo de bebé.
Si no tienes música de
relajación puedes hacerlo con cantos gregorianos, Mozart, Bach…, pues también
armonizan la energía del entorno, o bien en absoluto silencio si te sientes ya
en paz.
Es mi deseo que vivas un 2017
sin memorias de sufrimiento y experimentes cosas bellas y nuevas en tu vida.
Abre la mente y expande tu conciencia, lo demás viene seguido.
Ignasi Montoliu -Naturópata y sanador
Precursor de la terapia
N.A.U. (nivel azul ultravioleta) y terapeuta de Eidosomática.
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